Natural alarma generó entre la ciudadanía de Algarrobo una nueva intervención ilegal que se llevó a cabo a mediados de esta semana en el Humedal El Membrillo. Hace poco más de un mes, en junio pasado, camiones ya habían ingresado al lugar para descargar áridos y escombros. Muchos vecinos se dirigieron entonces al municipio para hacer la denuncia respectiva ante los departamentos correspondientes, buscando poner freno a esta situación. Esgrimiendo éstos cualquier competencia legal por tratarse de acciones dentro de "propiedad privada", solo el departamento de Medio Ambiente respondió de manera favorable, acudiendo su encargado en forma personal y exclusiva a intentar detener, infructuosamente, la faena de las máquinas.
Esta semana, una retroexcavadora y un par de camionetas se mantuvieron largas horas dentro del humedal. Según informara Marcelo Inostroza de la unidad de medio ambiente municipal, la intervención ilegal habría tenido por fin instalar tres sondas para medir los efectos de las mareas en las napas subterráneas. Como es necesario aclarar, la zona se encuentra actualmente en medio de una tramitación legal tendiente a redefinir los límites de las aguas del humedal. Como la legislación vigente así lo distingue, lo que se refiere al componente hídrico de todo humedal se considera un bien nacional de uso público, por tanto impedido de intervenirse o modificarse en cualquier sentido. El resto del terreno se encuentra tipificado dentro del Plan Regulador Comunal como "zona con restricción" precisamente por consideraciones ambientales y de riesgo urbanístico.
Cabe recordar que las pretensiones inmobiliarias sobre el lugar obligaron a emprender acciones legales con el fin de preservar este último segmento no intervenido de un rico ecosistema. Encabezadas por la Fundación Kennedy en conjunto con el Departamento de Medio Ambiente local, éstas han obtenido hasta ahora una respuesta favorable por parte de organismos superiores de la administración estatal. Aún así, con anterioridad a esto, la Dirección de Obras Hidráulicas ya había rechazado el denominado proyecto "Eco-Parque" haciendo mención, entre otras consideraciones legales, a la total prohibición a "construir casas para viviendas y con mayor razón formar poblaciones en suelos periódicamente inundables, aun cuando la inundación se presente en periodos de hasta 10 años”, tal como sucede en El Membrillo y las lluvias de septiembre pasado pusieron nuevamente en evidencia, cuando amplios sectores que habitualmente se mantienen secos se vieron de golpe cubiertos por grandes volúmenes de agua.
Humedal El Membrillo en septiembre de 2014